La autora de “La isla de las mariposas” y “El jardín a la luz de la luna“, Corina Bomann, publicó hace un tiempo una nueva novela llamada “El templo del jazmín“. Una ficción que, aunque cuenta algunos momentos duros, también tiene una historia de superación magnífica, y que consigue que sigamos los pasos de dos mujeres que nos hacen viajar desde Saigón hasta Berlín o París.

**Ficha técnica de “El templo del jazmín”**

Reseña de “El templo del jazmín”, de Corina Bomann – image vía Amazon

Autora: Corina Bomann
Editorial: Maeva
Género: Narrativa
Longitud: 455 páginas
Año de publicación: 2016
Formato: versión digital y versión impresa
ISBN: 978-84-16363-80-3

**Argumento de “El templo del jazmín“**

Melanie Sommer es la fotógrafa de moda del momento. Tiene un talento innato para sacar lo mejor de las modelos, en entornos envidiables, haciendo que sus trabajos sean muy cotizados. Viaja por el mundo día sí y día también y, aunque eso le estresa un poco, le encanta su profesión. Pero ahora tiene la cabeza en otra parte, pues se va a casar y necesita que todo esté perfecto para ese gran día: Las invitaciones, el convite, el vestido….

Sin embargo, cuando menos se lo espera, Robert, su prometido, sufre un terrible accidente de tráfico que lo deja en coma. A Melanie se le viene el mundo encima. No sabe qué hacer, cómo actuar y aunque siempre ha sido una mujer decidida este revés la ha superado, viéndose incapaz de afrontar la situación. Necesita cambiar de aires, salir de su día a día de hospital y decide ir al campo, donde viven su bisabuela Hanna, una vietnamita maravillosa y agradable que ha tenido una vida bastante complicada y que consiguió enderezar. Y Marie, su madre.

Melanie pasará gran parte de los días acompañando a la anciana y ésta decidirá contarle una historia, la suya, que no ha contado nunca a nadie. Una vida difícil en un lugar tan exótico como Saigón a principios del Siglo XX, su llegada a Berlín, cómo conoció al gran amor de su vida, la guerra y sus penurias así como los nuevos comienzos en la ciudad del amor. Una historia que llegará a lo más hondo de Melanie y que le hará ver la vida con otros ojos, reaccionar e ir más allá.

Sobre la autora: Corina Bomann

Corina Bomann, autora de “El templo del jazmín” – Image vía maeva

La passión de Corina Bomann (Parchim, Alemania, 1974) por la literatura se remonta a su infancia, pues a los cuatros años ya inventaba sus propias historias. Más tarde comenzó a escribir relatos y cuentos, primero en los cuadernos del colegio, luego a máquina y finalmente en el ordenador. En el año 2002, convirtió su pasión en profesión y escribió su primer libro. Desde entonces ha publicado novelas históricas y juveniles, pero la fama le llegó con “La isla de las mariposas“, que se tradujo en varios países europeos y estuvo en las listas de los libros más vendidos en Alemania.

Repitió su fórmula de éxito con “El jardín a la luz de la luna“.

**Opinión personal sobre “El templo del jazmín“**

Como he dicho anteriormente, las dos primevas novelas de esta autora me cautivaron por completo. No sólo por las historias que se cuentan en ellas, que también, sino por la magistral manera que tiene de plasmar las realidades, de hacer que afloren los sentimientos en el lector, ya sea con los buenos momentos o los malos que viven los personajes, además de por la facilidad que tiene para hacernos viajar a lugares exóticos y diferentes, consiguiendo que, mientras las leemos, dé la sensación que las estamos viviendo y sintiendo de primera mano. Esas descripciones, esos pequeños detalles, esa magia que destila…. son únicos. Y, como no podía ser de otra manera, no podía (valga la redundancia) dejar de leer esta última novela publicada el pasado año. Y he decir que Corina Bomann ha vuelto a hacerlo, ha conseguido cautivarme de principio a fin.

Y es que, es de esas novelas que tiene de todo: amor, duros reveses que da la vida, sinceridad, amistad, ilusión, esperanza, superación, lugares exóticos y hasta mágicos, en algunas ocasiones, y, sobre todo, dos historias entremezcladas que consiguen hacerte vivir toda clase de emociones. Y con “El templo del jazmín“, la autora no hace sino demostrar por qué se ha convertido en la indiscutible reina del género landscape.

Con personajes tan interesantes y reales como el de Melanie, una de las mejores en su trabajo y capaz de todo para conseguir todo lo que se propone, no se ve con fuerzas para seguir adelante ella sola cuando recibe la noticia del trágico suceso que lleva a Robert a un coma. Necesita impulso, que alguien le haga ver que la vida continúa, que es joven y que tiene la fuerza interior necesaria para ir afrontando lo que la vida le depare. ¿Y cuál es su mejor refugio? el campo, un lugar genial en el que poder descansar, tomar aire y, sobre todo, recibir el consuelo y refugio de su bisabuela (donde además hay un museo de moda inaugurado varios años atrás) y en el que conseguirá dejar de lado, aunque solo sea de vez en cuando, sus miedos y su dolor. U otros como Hanna, su bisabuela, una de esas tantas supermujeres que hay en el mundo que han padecido tantas cosas y que, sin embargo, tienen tanta fuerza, que hacen ver las cosas de otra forma, y son observadoras por naturaleza que se dan cuenta de todo. Y ésta entiende por lo que está pasando su querida y adorada biznieta y decide contarle una historia que nadie más sabe.

Pero además de los personajes, son muy destacables también los relatos y los lugares. Hanna le cuenta cómo vivía en Vietnam, a principios del siglo XX, cuando era aún colonia francesa, y ella apenas una niña. Pero también todas las adversidades a las que tuvo que hacer frente, a su corta edad, haciendo vivir, en su nieta Melanie, y de paso en el lector, momentos duros y muy crueles, para posteriormente dar paso a otros más agradables e incluso dulces (como cuando conoció al que fue su gran amor). Y todo ello, lo encuadra de forma asombrosa, como he dicho anteriormente, en lugares únicos y con unas descripciones a las que no les falta nada.

Sin duda, la pluma de la autora es ágil, agradable y cuidada, y es algo que se nota por cómo lleva al lector por donde quiere. He de decir que las tres novelas me parecen fabulosas y que he disfrutado mucho con ellas, pero para serte sincera, estimado lector, he de confesarte que, aunque varias amigas que las han leído me dicen que estoy algo equivocada, “El jardín a la luz de la luna” es la que más me gustó y, de hecho, me pareció realmente mágica. Ya sabes que para gustos los colores, pero esa segunda, en mi opinión, tiene un je ne sais pas quoi que la ha convertido en una de mis preferidas.

Solo resta decir que “El templo del jazmín” es un verdadero novelón que no hay que dejar de leer. Que es de esas que te hacen vivir sensaciones y emociones, a veces contrapuestas, pero que como en la vida misma existen. Por todo ello decidí que no podía falta entre las lecturas recomendadas de este verano junto a otras como “El encanto” o “El lenguaje de las abejas“, realmente mágicas.