Cracovia es una amalgama de estilos. Una ciudad de cuento donde Renacimiento, Barroco y Gótico se entremezclan en la arquitectura presente dotando al centro histórico de una belleza única, considerado como Patrimonio de la Humanidad desde 1978.
La ciudad, a los pies de la colina de Wavel y bañada por el río Vistula, ha sido reconocida siempre como uno de los centros económicos, artísticos y culturales de Polonia.
Cracovia en el plano turístico tiene fundamentalmente tres puntos de interés: la ciudad medieval y su bulliciosa Plaza del Mercado, la colina de Wawel con el Castillo Real y la Catedral de San Estanislao y San Wenceslao ubicados en su ladera y el núcleo medieval de Kazimierz.
Qué ver en Cracovia: Plaza del Mercado, Castillo Real, Catedral de Wavel y barrio judío
Plaza del Mercado de Cracovia – Imagen de Pko
La Plaza del Mercado, flanqueado por cafeterías y restaurantes, palacetes y galerías de arte, se constituye en el centro histórico de la ciudad. La iglesia gótica de Santa María, cuya construcción data del siglo XIV, enaltece con sus espigadas torres la aglomerada plaza llena de visitantes que eligen Cracovia como destino turístico. Haz click aquí e informate de hoteles, alquileres vacaciones, vuelos y actividades en esta ciudad.
El Castillo Real, también considerado Patrimonio de la Humanidad, de estilo renacentista alberga uno de las más deslumbrantes colecciones de tapices flamencos; mientras que la catedral gótica, conocida como de San Estanislao y San Wenceslao, ubicada en la colina de Wavel, se constituye en el panteón nacional de Polonia donde se encuentran los restos mortales de algunos monarcas polacos.
Concretamente, el rey Ladislao I el Breve, que ordenó su reconstrucción tras el devastador incendio que sufrió en el año 1305, fue el primer soberano coronado y enterrado en esta catedral.
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Por último, en Kazimierz, que en otro tiempo llegó a ser centro histórico de los judíos de Cracovia, destacan sus murallas y arquitectura judaica. Y en la actualidad se celebra una de los festivales de la cultura judía más prestigiosos.
De hecho, Cracovia es especialmente conocida por sus festivales anuales de música clásica, de cine o teatro en la calle.
Panorámica de la colina de Wavel en Cracovia – Imagen de Taxiarchos228
Alrededores de Cracovia: minas de sal de Wieliczka y campo de concentración de Auschwitz
En las inmediaciones de Cracovia dos visitas obligadas son, sin duda, a las minas de sal de Wieliczka y al campo de concentración de Auschwitz.
Las minas de sal se encuentran escasamente a unos quince kilómetros de Cracovia e incluyen un recorrido turístico de unos tres kilómetros aproximadamente en el que se pueden ver esculpidas en la roca de sal estatuas de personajes míticos e históricos, capillas, cámaras y exposiciones.
Entrada de las vías del tren al campo de concentración de Auschwitz-Birkenau – Imagen de diariocero.com
Por el contrario, en Auschwitz, a unos sesenta kilómetros de la ciudad, nos adentraremos en una de los episodios más cruentos de la historia vislumbrando los barracones y crematorios que albergaron las cámaras de gas donde fueron asesinados más de dos millones y medio de judíos. Este campo de concentración fue el mayor centro de exterminio de la historia del nazismo.
Actualmente es posible visitar los dos campos: Auschwitz I, el campo de concentración original y Auschwitz II o Birkenau, construido posteriormente como campo de exterminio.
La mayoria de fotografias recogidas en el libro que se anuncia bajo esta lineas fueron realizadas por los propios soldados que custodiaban las instalaciones de los campos de concentracion y muestran hasta donde llegó la crueldad de mentes tan perversas que idearon la eliminación sistematica de una población, la judia, solo por el simple hecho de ser diferentes.
