El concepto de paraíso suele estar asociado a lugares que requieren de horas y horas de avión: Costa Rica, las islas Caimán, República Dominicana, las islas Fiji… son algunos de los rincones del planeta en los que, por su infinita belleza, el Cielo tendría envidia. Pero, ¿y si tu destino paradisíaco no estuviese a más de dos horas de avión? ¿Y si fuese incluso territorio español? En efecto, hablamos del destino favorito de ”Los Mismos”, Mallorca.
Lo que debes saber de Mallorca
Mallorca es la isla más grande (en latín era denominada ”insula maior”, por ”isla mayor”, y de ahí ”Maiorca”) de la comunidad autónoma, Islas Baleares, y se sitúa entre Ibiza y Formentera por el suroeste y Menorca por el noreste. Tiene 3640 km², lo que la convierte en la isla más extensa de España y aproximadamente 900.000 habitantes. Pero, ¿qué hace de esta isla un lugar tan asombroso? Prepárate para no poder cerrar la boca.
La gastronomía
Ensaimada, sobrasada, gató, cuartos, frito mallorquín, el licor de hierbas, coca de trampó, las sopas mallorquinas… Existe una amplia variedad de productos autóctonos que desde luego harán las delicias del paladar del visitante. Una de los hechos que más sorprenden en el aeropuerto de Mallorca, es la ingente cantidad de turistas que se llevan la maleta, la mochila… y dos pares de ensaimadas. No querrás volver a casa sin un pedacito gastronómico de la isla.
El Castillo de Bellver
Desde el siglo XIV, se alza una torre por encima de un bosque de pinos que atesora una espectacular vista de toda la Bahía de Palma. Y aparte de fuerte, tuvo también su protagonismo como cárcel. Sin ir más lejos, Gaspar Melchor de Jovellanos estuvo confinado en él en el siglo XIX. El mar contemplado desde la más alta de sus torres le quita el habla a cualquiera.
El casco antiguo de Palma
Pasando por el Paseo del Borne, recorriendo Jaime III, tomando algo en la plaza Mayor, contemplando el olivo milenario en la Plaza de Cort junto al Ayuntamiento, parando a descansar en el Parque del Mar, indagando en las calles que conducen a los baños turcos, visitando la iglesia de San Francisco… Coge tiempo, un buen desayuno (en Can Joan de s’aigo, por ejemplo) y la cámara porque ninguno de estos tres te será prescindible.
Cabrera
Denominado Parque Nacional Marítimo, recibe su nombre por las abundantes cabras montesas que habitaban en ésta. Esta isla, perteneciente a Mallorca, albergó también varios episodios bélicos, siendo utilizada como cárcel. Actualmente, es un ambiente puramente virgen al que sólo se puede acceder en barco. No es barato, pero la excursión y las imágenes que guardaras en tu retina no tienen precio.
Las cuevas
En un pequeño pueblo situado en el levante de la isla llamado Portocristo, nos encontramos con una de las maravillas naturales de la isla, las cuevas del Drach. Estas cuevas presentan un desarrollo horizontal cercano a los 1.200 metros de longitud y una profundidad, de hasta 25 m. bajo la superficie. Inmerso en la absoluta oscuridad, se puede disfrutar incluso de un concierto de 10 minutos. Eso sí, no se pueden hacer fotos por lo que nadie puede llevarse de allí el secreto.
La Catedral
También denominada como ”La Seu” y declarada Monumento Histórico-artístico, se empezó a contruir en 1229. Tiene en su haber el mayor rosetón gótico de todas las catedrales góticas europeas y, si la suerte está de tu lado, podrías coincidir con el fenómento del 8, en el que el Sol junta la luz de los rosetones provocando una asombrosa y onírica imagen. Es, sin duda alguna, la joya de la corona del centro de Palma.
Las calas más recónditas
Por último, y en este caso sí lo más importante, encontramos el secreto de la isla. No es casualidad que también sea denominada la Isla de la Calma. Cientas de playas escondidas se esconden a lo largo de toda la costa de la isla. Si se rodeara la isla, haría falta más de un año para visitar todas las calas vírgenes. Muchas de ellas presumen incluso de una alta exclusividad, ya que sólo se puede acceder a ellas mediante barco. Es Caló des Moro, Cala Torta, Cap de Formentor, Cala Llamp… son algunas de las que poseen el título de ”must be visited”.
Si el paraíso insular te ha convencido, es recomendable ampliar la visita con una guía completa de la isla con el fin de no perderse ninguno de los mil y un lugares emblemáticos de ésta. Mi recomendación es esta: