Tiempo sin aire
Intérpretes: Juana Acosta, Carmelo Gómez, Adriana Ugarte.
Producción española.
Duración: 106 minutos.
Es la segunda cinta dirigida por estos dos directores. En 2009 dirigieron “Agallas”, una cinta interesante con Carmelo Gómez y Hugo Silva. Ahora, con “Tiempo sin aire”, entregan al público un nuevo filme con una historia dura, desasosegante, crítica, impactante, con mucho potencial y mucha fuerza.
Narra la historia de una venganza. María, una enfermera colombiana, viaja con su hijo pequeño desde su país hasta Santa Cruz de Tenerife para encontrar a uno de los tres paramilitares que violó y asesinó a su hija adolescente en plena selva. Guarda una foto que se encontró casualmente del militar con Vero, su novia española, y lo único que sabe y que pone en la foto es que se llama Iván. Con esa sola información, se dispondrá a encontrar en Santa Cruz al asesino de su hija. Durante su búsqueda conocerá a un psicólogo escolar llamado Gonzalo que se enamorará de ella, y que le ayudará a buscar al asesino.
“Tiempo sin aire”: La venganza que no engancha
“Tiempo sin aire” es una cinta comprometida, que reflexiona sobre el sentido de la venganza, sobre las consecuencias de la violencia en los conflictos armados, y también sobre el poder del mal en el ser humano. Es un filme amargo, sin concesiones, con personajes marcados y heridos de por vida, llenos de amargura y desconsuelo, enfermizamente obsesionados.
Con todo este material hay para hacer una buena cinta. Pero, lamentablemente, los directores no han sabido sacar todo el provecho que merecía, y “Tiempo sin aire” se queda en un largometraje que se deshincha muy pronto y del que se pierde el interés pasados los primeros veinte minutos.
Le falta verdadera garra, y no logra levantar el vuelo esta cinta que podía dar mucho más de sí, y que sólo provoca el tedio y el desinterés en el espectador, a pesar de los estupendos trabajos de los actores. Juana Acosta encarna con credibilidad y emoción a esta madre ultrajada, y Carmelo Gómez nunca defrauda: es un actor poderoso, intenso, al mismo tiempo que vulnerable y sensible.
La venganza siempre es un tema poderoso para la ficción, que da mucho juego, repleto de acción, reflexión y emoción. Una lástima que de la historia tan interesante de “Tiempo sin aire” no se haya hecho una cinta a la altura que merece.