Intérpretes: Jennifer Lawrence, Robert de Niro, Bradley Cooper, Isabella Rosselini, Diane Ladd.
Guión: David O. Russell y Annie Mumolo.
Duración: 124 minutos.
Esta chica es un portento. Jennifer Lawrence, la actriz protagonista de esta cinta titulada Joy, su tercera colaboración con el director David O. Russell tras la estupenda El lado bueno de las cosas y tras la aburrida y sobrevalorada La gran estafa americana, es una actriz llena de talento, expresividad, cercanía y atractivo. Es la gran actriz del momento, y con todo el mérito.
Esta vez en Joy encarna con fuerza y credibilidad y también con mucha ternura, a una mujer joven que se hace a sí misma. Una mujer luchadora que trabaja en el aeropuerto y que desde niña es inventora de complementos de moda y demás, y que tiene que sacar adelante ella solita, y con muchas dificultades, una casa en la que convive con una madre que se esconde del mundo mirando telenovelas todo el día, a un padre recién separado de su exmadrastra y que no tiene dónde ir, y a un exmarido cantante que no se va de casa porque no tiene donde caerse muerto y que vive en el sótano. Ella es el sustento emocional y casi económico de todos, es el alma de esa familia de clase media.
Joy: Homenaje a la mujer
La cinta está basada en un hecho real. Es la historia de Joy Mangano, de Long Island, una chica valerosa y de buen corazón que creía en sí misma, y que llegó a convertirse en una estrella de la teletienda nocturna al inventar una súper fregona que absorbía mucho más que las conocidas.
Es siempre saludable y destacable encontrarse con filmes que enaltezcan la figura y la condición de la mujer, que representen a las millones de mujeres repletas de fuerza e ilusión que han sacado adelante su vida y la vida de los suyos con mucho esfuerzo y sacrificio. Resulta estupendo que se hagan homenajes, y cuantos más mejor, a la figura de la mujer. Nunca serán suficientes.
Joy: Jennifer Lawrence es la película.
Y ella, Jennifer Lawrence, hace que este film funcione, que sea a ratos dramático y a ratos divertido, que resulte una cinta que se vea con agrado aunque no sea una gran comedia. Destacan también los secundarios, pero todo está hecho para que brille la estela de esta soberbia actriz que, como las grandes, parece haber nacido dentro de la pantalla, que su hábitat natural sea ese otro lado y esa otra vida que es el cine y la ficción.
Ya ha ganado el Globo de oro por este trabajo, y está nominada al Óscar como mejor actriz protagonista. Es una de las favoritas.
