El protagonista de esta En realidad, nunca estuviste aquí es un tipo atormentado, muy serio, muy solitario, que luce una poblada barba ya canosa y que descuida su manera de vestir; un hombre silencioso, sufridor, que vive con su madre mayor a la que adora, y que está marcado por una infancia terrible por un padre maltratador y cruel, y por su paso por el ejército en el que tuvo que viajar a la guerra de Irak y sufrir hechos que no para de recordar amargamente.
Además se dedica a hacer trabajos sucios: se ha convertido en una especie de sicario por el que cobra grandes cantidades de dinero por salvar a mujeres que son explotadas sexualmente. A esto le ayuda su nula moralidad, su total descreimiento sobre la raza humana y el mundo, y su gran violencia, porque todo le ha convertido en un ser muy violento y despiadado, contundente y eficaz cuando debe serlo. Es un ser falto de esperanza y de cariño; una persona maltratada, y así se comporta.
El conflicto comenzará cuando, contratado por un senador para que recupere a su hija adolescente a la que han secuestrado para prostituirla y hacer pagar a todos los que lo han hecho, las cosas no saldrán como se esperaban, y la escalada de violencia se hará cada vez mayor.
En realidad nunca estuviste aquí: Un gran Joaquin Phoenix
El retrato de este personaje interpretado por el camaleónico Joaquin Phoenix es de lo mejor de la cinta. Encarna con eficacia y mucha credibilidad esa neurosis, esa tensión, esa angustia y ese sufrimiento sin tregua que padece este personaje tan introvertido como inquietante. Es un hombre herido en lo más profundo de su ser; lleno de dolor, rabia, angustia, silencio, rencor e incomprensión, con un infierno interior insoportable, y el actor lo sabe transmitir de manera acertada y sensible. Es un actor al que le vienen muy bien, los borda, este tipo de personajes tan especiales, que viven en los límites.
Y ya solo por esto merece la pena acercarse al cine. Para disfrutar de este actor que llena completamente la pantalla y que nos hace comprender la agonía en la que reside este exsoldado perturbado; en una cinta que, por lo demás, flojea en el guion, cuyo argumento resulta simple, demasiado fácil y hasta inverosímil por momentos, y al que se le echa en falta mayor desarrollo en su parte final ya que termina de forma demasiado precipitada, a pesar de tratarse de una marca de estilo del director. Se podría haber dado otro mejor resultado a un argumento tan interesante como este, propio de cineastas como Scorsese o Abel Ferrara.
De todas maneras, es una cinta interesante En realidad, nunca estuviste aquí, que trata del delicado tema de la prostitución infantil. Es un film triste de un personaje marcado por la desgracia y el infortunio, y que parece que no tiene salida.
Duración: 95 min.
DirecciónLynne Ramsay
Guion: Lynne Ramsay (Novela: Jonathan Ames)
Música: Jonny Greenwood.
Fotografía: Thomas Townend
RepartoJoaquin Phoenix, Alessandro Nivola, John Doman, Judith Anna Roberts,Alex Manette, Ekaterina Samsonov, Kate Easton, Jason Babinsky, Frank Pando,Ryan Martin Brown, Scott Price, Dante Pereira-Olson, Jonathan Wilde,Leigh Dunham, Vinicius DamascenoProductora