En las cintas de Daniel Calparsoro, uno de los directores españoles más interesantes y personales, y con una ya tan extensa como rica trayectoria, el espectador siempre encuentra unos rasgos de estilo y unos temas muy reconocibles. Su cine es frenético, pasional, nervioso, rotundo; con personajes desbordados, muy sentimentales, casi desesperados, inmersos en asuntos que les intentan ahogar y que no se esperaban, y que luchan por no sucumbir, por salvarse. Son inolvidables para todo cinéfilo sus cuatro primeras cintas nacidas en los años 90 y con las que sorprendió con su clara personalidad, haciéndose un hueco rápidamente en el panorama cinematográfico: Salto al vacío (1995), Pasajes (1996), A ciegas (1997) y Asfalto (2000), y todas con la que fuera su musa personal: la actriz y cantante Najwa Nimri, esa mujer llena de fuerza y de extraño magnetismo. Probablemente en ellas, se encuentre lo mejor de este director barcelonés nacido en el 68.
Es cine al que se le sale el corazón por la garganta, con historias que resultan muy verdaderas, muy humanas, arrebatadoras. Calparsoro, con todo esto, ha sabido siempre captar la atención de los espectadores, y por ello se ha situado, y con todo merecimiento, entre los directores que no defraudan del cine español.
El aviso: Thriller sorprendente con elementos fantásticos
Y con este nuevo triller El aviso, su décimo largometraje, y después de los thrillers Combustión y Cien años de perdón, vuelve a entregar una cinta que al espectador no le deja indiferente, ya le agrade más o menos.
Con esta historia de intriga basada en una novela de Paul Pen, que posee detalles fantásticos o sobrenaturales -rasgos que utiliza por primera vez el director en su filmografía-, sobre un joven interpretado por un gran Raúl Arévalo que está obsesionado con los números, y que se dedica a investigar tras la muerte accidental de su compañero en una gasolinera en un ajuste de cuentas, por qué en ese mismo lugar y en el mismo día han ocurrido varios trágicos sucesos a lo largo del tiempo, Calparsoro consigue esa inquietud y esa tensión en el espectador que pretendía.
Y eso, se puede decir, que ya es mucho. Y hasta puede hacer con ello olvidar a los espectadores -quizá a todos no- la posible inverosimilitud y la posible artificiosidad de algunas partes del guion; o la probable confusión de ciertas partes del argumento, de este film que no está cuajado del todo, pero del que se agradece su originalidad y la profesionalidad y el brío con el que está dirigido e interpretado.
Merece la pena acercarse a la sala.
Año: 2018.
Duración: 92 min.
País: España.
Dirección: Daniel Calparsoro
Guion: Chris Sparling, Jorge Guerricaechevarría, Patxi Amezcua (Novela: Paul Pen).
Música: Julio de la Rosa.
Fotografía:Sergi Vilanova
Reparto: Raúl Arévalo, Aura Garrido, Hugo Arbués, Belén Cuesta, Antonio Dechent,Aitor Luna, Luis Callejo, Sergio Mur, Julieta Serrano, Juan López-Tagle,Antonio Durán, Alfredo Villa, Patricia Vico, Javier Perdiguero, Jorge Usón,Jon Bermúdez, Mateo Jalón, Ignacio Herráez y Víctor Castillo.
