Las esperanzas de hallar un planeta similar al nuestro en Marte, desaparecieron cuando la nave Mariner 4 de la NASA envió las primeras fotografías de su acercamiento, al sobrevolar la superficie marciana. Pero además de revelar cráteres y un árido desierto de color rojo, esta misión nos acercó a un mundo con más maravillas de las observables a simple vista.
Estos son cinco datos sorprendentes del planeta Marte.
Marte tiene la montaña más grande
Pero no solo comparativamente con nuestro planeta, sino con relación a todo el Sistema Solar. Se trata del volcán Monte Olimpo. Este coloso de Marte mide 26 kilómetros de alto y 624 kilómetros de ancho. Es tres veces más alto que el Monte Everest, la montaña más grande de la Tierra. También supera por mucho al Mauna Kea en Hawái, el volcán terrestre más elevado, el cual se alza a 10 mil metros desde el fondo del Océano Pacífico.
Marte tuvo arroyos y lagos
Nuestro rojo vecino no siempre tuvo la desolada y polvorienta imagen que hoy proyecta. De acuerdo a las referencias cartográficas obtenidas por los vehículos orbitales Mars Global y Viking y la sonda Mariner 9, se detectaron valles en el hemisferio sur marciano, así como también evidencias de arroyos que caían por los costados de sus ásperas montañas. En el 2014 el rover Opportunity encontró nuevas pruebas de que Marte tuvo arroyos y lagos: rocas denominadas esmectitas, minerales arcillosos que solo aparecen cuando existe agua con un PH neutro.
Marte tiene estaciones como las terrestres
Nuestro vecino rojo se distingue de la Tierra en que cuenta con una órbita más elíptica y en ciertos periodos del año se ubica más cerca del Sol. Por lo consiguiente el verano y la primavera son más prolongados en el hemisferio norte que en el hemisferio sur del planeta rojo. En tanto el hemisferio norte de Marte experimenta un dilatado verano, en el sur los inviernos son extremos, ya que buena parte del tiempo la poción austral de Marte se encuentra en total oscuridad.
Marte y sus tormentas de polvo
Tan fino como el humo es el polvo marciano y puede flotar inclusive en la tenue atmósfera de nuestro rojo vecino. Como la gravedad marciana es tan débil, las minúsculas partículas de polvo son capaces de volar decenas de kilómetros y tardar meses en caer, de manera que el polvo cubre al planeta, manteniéndose en el aire durante meses enteros. La tormenta de polvo más grande de la que se tenga registro en Marte fue captada por la nave Mariner 9 cuando llegó en 1971 al planeta rojo.
Marte tiene enigmáticas cuevas
En el año 2007 cámaras infrarrojas instaladas en el vehículo espacial Martian Odyssey captaron un grupo de cuevas que fue denominado como “las siete hermanas”. El complejo se ubica cerca del volcán Arsia Mons. Desde las alturas esas cuevas marcianas dan la apariencia de ser tragaluces, los cuales descienden muchos metros hasta desembocar en sumideros o tubos de lava. Al tratarse de sitios resguardados, son excelentes lugares para buscar pruebas de vida en el pasado de Marte.
