Los Beatles, como grupo y como solistas, antes y después de la separación, siguen siendo noticia. Millones de fans de todo el mundo y de todas las edades estamos atentos al lanzamiento de álbumes con recopilaciones y remasterizaciones de sus grandes éxitos, así como de los cientos de productos que mantienen viva la beatlemanía.
Ni en mis sueños más locos de adolescente consideré la posibilidad de que algún día recibiría invitaciones y noticias de los Beatles o de alguno de ellos. Ahora es cosa de todos los días que en la bandeja de entrada de mi correo electrónico (otro sueño no soñado) aparezca un mensaje de Paul McCartney, gracias a internet y a que un día me suscribí a su página oficial.
Descubrí a los Beatles hace muchos años, cuando ya eran una sensación en todos los continentes, cuando su música, el largo de su cabello, sus declaraciones, giras y vidas privadas estaban en boca de todo el mundo. En ese entonces no sabía nada de inglés, bueno quizá unas cuantas palabras y expresiones, pero no las suficientes para entender las letras de sus canciones, aunque hay que recordar algunas que a los angloparlantes les costó entender por haber sido escritas para retar a quienes analizaban las canciones del cuarteto como parte de la enseñanza del idioma, como ocurrió con I am the Walrus, con la que John Lennon les jugó una broma, producto de su genialidad, acervo cultural y sentido del humor. Pero no entender el idioma no era ni es obstáculo para caer en las redes del cuarteto. Una vez que escuché su música supe que iba a estar conmigo para siempre. Comprar los EP y, luego de ahorrar durante varios meses, sus LP era una forma de asegurarme que podría escucharlos siempre que quisiera y no depender de la programación de la radio.
Durante años, para seguir los pasos del cuarteto de Liverpool no había como la radio y unas que otras publicaciones. Mientras los Beatles estaban de gira, aparecían en televisión y daban mucho de qué hablar por su constante experimentación musical y existencial, en México deseábamos que algún día ofrecieran un concierto en estas tierras. Nunca pudo ser.
Películas de The Beatles que siempre podrás ver
A Hard Day’s Night, primero, en blanco y negro; y Help poco después, a todo color y con ese toque de las películas de James Bond, reunieron a miles y miles de fans en las salas en donde se proyectaron.
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Sabíamos que era la única forma de vivir la emoción de verlos, escucharlos hablar, actuar y cantar, de manera que no nos podíamos perder estar ahí, aunque la clasificación que se hizo en el país no fue para adolescentes y adultos, los más chicos nos las ingeniamos para entrar a las salas.
Las siguientes incursiones de los Beatles en cine fueron con Magical Mistery Tour, película para televisión, Yellow Submarine, filme animado que incluye un cameo del cuarteto y Let It Be, un documental imperdible.
A más de 40 años de su separación la historia de los Beatles todavía se está escribiendo. Videos, películas de ficción y documentales dan cuenta de la fascinación por el cuarteto y su legado que sienten sus herederos, investigadores, periodistas, escritores, editores, músicos, productores, cineastas y otros artistas por llevar a las páginas impresas, a las pantallas fragmentos de la herencia musical del cuarteto y de las personas y situaciones que había atrás del escenario.
Imagina a 350 millones de personas viendo por televisión al mismo tiempo, en 1967, la primera transmisión vía satélite que unió al mundo al compás de All you need is love, en donde los Beatles cantaban rodeados de celebridades coreando este himno de amor y paz, tan necesario entonces y en todo momento. Aunque, como toda historia, la de The Beatles y de cada uno de sus integrantes también ha tenido sus momentos dolorosos. Pregunta a quien se haya enterado en su momento sobre la muerte de Brian Epstein, su representante, cuál fue su reacción; pídele que te platique su versión sobre la separación del grupo y ya entrados en el tema pregúntale en dónde estaba y cómo recibió la noticia sobre la muerte de John Lennon y posteriormente la de George Harrison.
Toda la historia y la música de The Beatles a nuestro alcance
La beatlemanía es un fenómeno vivo, actual. A más de cincuenta años del surgimiento del más influyente fenómeno musical y cultural del siglo XX, los Beatles siguen siendo noticia, por el lanzamiento de nuevos productos discográficos, la publicación de libros, por la exhibición de películas protagonizadas por ellos o realizadas para dar a conocer aspectos íntimos de su vida u homenajearlos como grupo o en forma individual.
Pero las noticias más importantes, en materia de música y espectáculos en años más recientes, han sido el lanzamiento de álbumes que compilan la música del cuarteto en foros como la BBC, de las canciones que alcanzaron el número uno en las listas especializadas y, por supuesto las Antologías. Es sorprendente la cantidad de álbumes, libros y videos del y sobre el cuarteto que están a nuestro alcance en línea y físicamente. Basta hacer un recorrido por las páginas oficiales de los cuatro y por la de Amazon para descubrir todo lo que se difunde y comercializa hoy en día.
Ya como parte de otras agrupaciones, entre las más destacadas están John Lennon and the Plastic Ono Band y Wings, o como solistas no dejan de sorprender a sus fans. Por sólo dar un ejemplo, el 23 de septiembre será lanzada la caja The Apple Years 1968-75, con seis álbumes de George Harrison, un DVD y un libro.
En cuanto a Paul McCartney, como parte de Wings, también hay expectación por el próximo lanzamiento de la caja con los álbumes Venus and Mars y At The Speed of Sound, estos últimos serán comercializados en sus versiones física y digital a partir del 4 de noviembre de este año.En cuanto a las giras mundiales, Paul McCartney disfruta como pocos artistas de los conciertos masivos. Tres veces ha incluido a México, entre 1993 y 2012, en las que el artista siempre se ha mostrado generoso e incansable, ofreciendo en cada presentación alrededor de tres horas de espectáculo que saca lo mejor de su veta roquera pero también del McCartney romántico, nostálgico y fiel a su larga amistad con John, George y Ringo y su amor a Linda.
Para cerrar este artículo no puedo dejar de mencionar que el 14 de agosto de este año, ya recuperado de la enfermedad que le hizo cancelar conciertos en Tokio, fue una fecha pletórica de simbolismos cuando ofreció un concierto ante 50 000 personas en el Candlestick Park, en San Francisco, el mismo sitio en donde se presentaron por última vez en concierto los Beatles, el 29 de agosto de 1966. Al respecto Paul señaló: The concert was a bittersweet occasion as not only was it the venue for The Beatles last-ever official public performance, the gig also marked the last-ever concert to take place in the park before it closes.
Ni en ese lejano 1966, ni en 1970 terminó la historia de The Beatles. Estoy segura de que mientras haya un fan del cuarteto y de cada uno de sus integrantes la historia continuará.
