
La adicción al Internet es un problema más real de lo que queremos admitir. Conoce sus síntomas y un breve cuestionario para saber si estás al borde de esta aflicción
La adicción al Internet (también conocida como ciberadicción) se refiere a ciertos patrones de comportamiento que una persona tiene en lo que se refiere a sus actividades en línea, llegando al punto de interferir con su vida cotidiana, afectando sus relaciones familiares, laborales o sentimentales.
Al igual que como ocurre con otras adicciones, la adicción al Internet consiste en que una persona necesita de las interacciones y relaciones que desarrolló en el ciberespacio para sentirse normal, por lo que la persona se siente desamparada o perdida al no estar en línea.
Síntomas de adicción al Internet
Se dice que los síntomas de adicción al Internet son sillares a los que mostraría una persona adicta al juego. En concreto, te listo algunos de esos síntomas a continuación. Si reconoces que todos se aplican a ti (a algún conocido) podrías sufrir (o tu conocido) de ciberadicción:
- Te das cuenta que constantemente estás pensando en tu actividad en Internet (pasada y futura).
- Necesitas pasar más y más tiempo en Internet para sentirte bien.
- Te das cuenta de que estás haciendo intentos infructuosos para controlar o limitar el tiempo que pasas en Internet.
- El intentar disminuir o limitar el uso de Internet te hace sentir inquietud, irritabilidad o depresión.
- Repetidamente te quedas en línea más tiempo del que era tu intención.
Otros síntomas son:
- Debido al uso de Internet has arriesgado la pérdida de una relación significativa, un trabajo o una oportunidad profesional.
- Comienzas a mentir respecto a la cantidad de tiempo que pasas en Internet.
- Lo que encuentras en Internet (juegos, chats, foros, etc.) te sirve como una forma de escapar de problemas cotidianos o te hace sentir mejor.

¿Padeces de adicción al Internet? – Imagen por Federico Morando
Cuestionario para saber si padeces de adicción al Internet
El siguiente cuestionario está publicado en la página netaddiction.com, que es una página dedicada a la adicción al Internet. La publicación original está en inglés, pero aquí te presento una traducción a español.
Instrucciones: Para cada pregunta utiliza la siguiente escala e indica la frecuencia con la que tienes el comportamiento descrito.
0 = No aplica; 1 = Rara vez; 2 = Ocasionalmente; 3 = Frecuentemente; 4 = A menudo; 5 = Siempre.
- ¿Con qué frecuencia te quedas en línea más de lo previsto?
- ¿Con qué frecuencia descuidas las tareas del hogar para pasar más tiempo en línea?
- ¿Con qué frecuencia prefieres las emociones que te da Internet a tener intimidad con tu pareja?
- ¿Con qué frecuencia estableces nuevas relaciones con otros usuarios en línea?
- ¿Con qué frecuencia se quejan otras persona en tu vida acerca de la cantidad de tiempo que pasas en línea?
- ¿Con qué frecuencia tus calificaciones o el trabajo escolar se sacrifican a causa de la cantidad de tiempo que pasas en línea?
- ¿Con qué frecuencia consultas tu correo electrónico antes de hacer las cosas que querías hacer al conectarte?
- ¿Con qué frecuencia tu rendimiento en el trabajo o tu productividad se ven afectados a causa de Internet?
- ¿Con qué frecuencia te pones a la defensiva cuando alguien te pregunta lo que haces en línea?
- ¿Con qué frecuencia el pensar en cosas agradables que haces en Internet te ayuda a dejar de pensar en cosas inquietantes o problemáticas en tu vida?
- ¿Con qué frecuencia te encuentras anticipando con emoción la próxima vez que estarás en línea?
- ¿Con qué frecuencia temes que la vida sin Internet sería aburrida, vacía y sin alegría?
- ¿Con qué frecuencia estallas, gritas o actúas con molestia si alguien te interrumpe mientras estás en línea?
- ¿Con qué frecuencia sacrificas horas de sueño debido a sesiones nocturnas?
- ¿Con qué frecuencia te preocupa quedarte sin Internet, o fantaseas con estar en línea?
- ¿Con qué frecuencia te encuentras diciendo “sólo unos minutos más” cuando están en línea?
- ¿Con qué frecuencia intentas infructuosamente reducir la cantidad de tiempo que pasas en línea?
- ¿Con qué frecuencia intentas ocultar el tiempo que has estado en línea?
- ¿Con qué frecuencia prefieres pasar más tiempo en línea a convivir con otras personas?
- ¿Con qué frecuencia te sientes deprimido, de mal humor, o nervioso cuando estás fuera de línea, sentimientos que desaparecen una vez que estás otra vez en línea?
Una vez que hayas respondido todas las preguntas suma tu puntuación y compárala con la siguiente escala:
Puntaje | Nivel de adicción | Comentario |
0 a 30 | Inexistente | |
31 a 49 | Leve | Eres un usuario normal. Quizá navegas mucho tiempo, pero tienes control sobre su uso. |
50 a 79 | Moderado | Estás experimentando problemas ocasionales o frecuentes debido a tu uso de Internet. Quizá debas poner atención al impacto que esto tiene en tu vida. |
80 a 100 | Grave | Tu uso de Internet está causándote problemas significativos en tu vida. Quizá debas tomar acción lo antes posible. |
¿Qué hacer si padezco de adicción al Internet?
Lo primero que hay que hacer es reconocer que Internet es parte de nuestras vidas cotidianas, al punto que se le está llegando a comparar con servicios básicos, como lo es la luz eléctrica, por lo que abstenerse de Internet por completo no es una opción realista ni razonable. En este sentido, la recuperación de la ciberadicción difiere de otras adicciones, como el alcoholismo o el juego, en los que se busca dejarlo por completo; en el caso de Internet se busca aplicar moderación en su uso.
Una vez dicho esto, cabe señalar que el uso de ayuda psicológica, de grupos de apoyo o soporte de miembros de la familia es recomendable para encontrar la fortaleza para eliminar esos excesos a los que ya se está acostumbrado. Eliminar las sesiones nocturnas, por ejemplo, es un paso importante, pero en realidad la ayuda de un profesional es recomendable, ya que el encontrar en Internet un escape implica que existe un problema en algún otro aspecto de “la vida real” (como se le llama en el mundo en línea) y que requiere atención.
La adicción al Internet no está clasificada como un trastorno por instituciones oficiales, pero se ha comprobado que las personas que padecen sus síntomas sufren de un mayor número de conflictos en sus relaciones personales (o en el mundo real, mejor dicho). Como muchas otras cosas, los excesos no son sanos y el uso excesivo de internet puede tener consecuencias desastrosas en tu trabajo o en tu desempeño académico.