No solamente en la Tierra ocurren considerables fenómenos climatológicos. En otros lugares del Sistema Solar también se presentan extraordinarios eventos de este tipo. Son tormentas, ciclones y huracanes extraterrestres, colosales y extraños, que nos hacen asombrarnos de lo similares que son en el fondo, pero alucinantemente distintos en la forma, los mundos del cosmos.
Misterioso ojo de Saturno
Tiene dos tercios del diámetro terrestre y se extiende por buena parte del polo sur del planeta Saturno. Es un extraño vórtice que evoca inquietantemente a un oscuro y misterioso ojo. Y si bien podría tratarse de un típico pero mucho más grande huracán como los que se producen en la Tierra, por su comportamiento se observa que es algo muy diferente. Los huracanes terrestres van a la deriva por el océano, mientras que el Ojo de Saturno permanece estacionario alrededor del polo sur. Además, este planeta anillado no tiene océanos.
Oval Ba, pequeña mancha roja de Júpiter
Todos saben que el planeta Júpiter tiene una enorme mancha roja, pero no es tan conocido que hay una mancha más pequeña, la cual fue observada desde su surgimiento por un grupo de astrónomos en el año 2000. Desde hace décadas se había estado observando a tres diminutos puntos en la superficie joviana, que se fueron fusionando en dos puntos más grandes y luego en uno, dándole forma a una gran tormenta, Oval Ba, aunque no tan grande como la Gran Mancha Roja de este colosal planeta.
De acuerdo a los cambios de tonalidad que exhiben, los expertos piensan que esta clase de tormentas jovianas arrastran materiales de las capas nubosas debajo de ellas, hasta las áreas más elevadas de la atmósfera, donde reaccionan con la radiación ultravioleta del Sol y propician alguna extraña reacción química hasta producir el característico color marrón de la Gran Mancha Roja.
El formidable hexágono de Saturno
Tal vez se trate del vórtice más raro y fascinante de este enorme planeta. Es tan grande que puede engullir de una sola vez a cuatro planetas como la Tierra. Se trata de una vasta tormenta que cumple una rotación cada diez horas. Al parecer surgió de la interacción de vientos atmosféricos de distinta velocidad, a partir de un área de turbulento flujo para terminar rotando alrededor de Saturno a distintas intensidades. Tomando en consideración que este hexágono saturnino se observó por vez primera en la década de 1980 y posteriormente en el 2006, se puede inferir que esta enorme tormenta extraterrestre ha existido durante siglos, perfilándose como un meteoro extraterrestre sumamente espectacular.
Diablos de polvo en Marte
Es un hermano menor, menos agresivo que un tornado y se presenta con frecuencia en la Tierra en las áreas desérticas, pero asombrosamente, también en el planeta rojo. Son los diablos de polvo, son remolinos de polvo que aparecen en ambientes calurosos, secos y desolados. Por eso Marte es propicio para que se produzcan con frecuencia. La diferencia es que los diablos de polvo de Marte son 10 veces más altos que los terrestres y algunos son 50 veces más anchos. Por supuesto se trata de peligrosas amenazas para las sondas y rovers terrestres enviados a Marte. Uno de ellos fortuitamente limpio los paneles solares de un rover astronáutico, quitando el polvo del robot, lo cual permitió que siguiera funcionando más tiempo.
Scooter de Neptuno
Vertiginosa tormenta que se desplaza a una demencial velocidad de 1,900 kilómetros por hora a través de la superficie de este distante planeta. Tan raudo es este meteoro que puede completar una circunferencia a Neptuno en tan solo 16 horas y considerando que este planeta es cuatro veces más grande que la Tierra es algo admirable en todos los sentidos. Los orígenes del Scooter de Neptuno y por qué se mueve a una velocidad tan grande siguen siendo un misterio, si bien los científicos opinan que podría tratarse de una columna ascendente desde la atmósfera interior de este extraño mundo.
