Con más de 25 años de experiencia, Sandra Velarde nos descubre “lo que no se ve” pero se siente, un proyecto con el que pretende despertar conciencias y empoderar a las personas, dejando aflorar la resiliencia que todos albergamos dentro.

Sandra, el sufrimiento nunca es gratuito. Existen verdaderas fórmulas matemáticas, psicológicas que hacen que las personas disfruten lo malo con una programación anterior. Algo mucho más sofisticado de lo que parece a simple vista. ¿En qué consiste esta fórmula autodestructiva?

– A esto que tú me preguntas, tiene el nombre de “placer negativo”, y si, tiene que ver con el apego a una formulación  básica de aprendizaje infantil. Es decir, cuando un niño nace y todavía es pequeño, siente placer tan solo de estar cerca de sus padres; la sola presencia de estos provoca este estado de plenitud y satisfacción, cualquier trato que los padres tengan para su hijo este lo apegará al placer que experimenta al estar con ellos, de ahí  que  si los padres trataron a su hijo con amor, este apega el amor al placer, si lo trataron con indiferencia, apega esta indiferencia al placer, si lo trataron con agresión sucede la misma situación; por eso que muchas personas no comprendan porque se apegan a relaciones dolorosas, estados emocionales complicados, o diversas relaciones tóxicas, es una programación, que puede y tiene un signo de superación y recuperación.

En tu espacio entrevistas a personas directamente afectadas y además, mantienes un feedback constante  con colegas y profesionales que aportan diferentes puntos de vista.  Solo hay una manera de visibilizar temas tan complejos como el suicidio o la depresión y pasa por el respeto y la comprensión. ¿Es este binomio la clave del éxito del programa?

El último proyecto de la psicóloga clínica Sandra Velarde.

– Quiero pensar que la clave de la audiencia que nos sigue son personas interesadas profundamente en su crecimiento emocional y personal, gente que tienen curiosidad sobre cómo otros seres han resuelto las diversas circunstancias que van experimentando y que, de alguna manera, dicho testimonio permite la ampliación de conceptos vitales que son transmitidos sin juicio, sin tendencia, y libre de expresión. el programa no tiene un guión, ni una preparación predeterminada, fluye libremente y eso tiene la riqueza de la honestidad y la libertad.

No hay nada más seguro en la vida que la muerte… y las crisis, agrega Sandra Velarde. Tener claro este concepto permite dirigir esfuerzos a afrontarlas desde otra perspectiva más saludable, incluso como una oportunidad. ¿Son las crisis parte importante de nuestro proceso evolutivo?

Sandra Velarde te invita a “abrazar el cambio”.

– Considero, Arancha, que las crisis tienen el signo del parto doloroso, que alude al cambio y, por supuesto al crecimiento, sin embargo; lo importante no es esta crisis con su crecimiento, sino la posibilidad de enfrentarlo. Todos los seres humanos estamos expuestos a diversas posibilidades de crecimiento a través de una crisis, es cuestión de emprender una nueva experiencia, un nuevo estilo de vida, y la crisis está ahí, esperando, pero la gente no toma estas decisiones de avance, cambio o crecimiento, no porque no quieran, no porque están lo suficientemente incómodas con su vida, ni siquiera por una falta de visión o inteligencia; no se toman esas decisiones porque no estamos listos con la fuerza necesaria y suficiente para enfrentarlos, de alguna manera, la parálisis previa a una toma de decisión es hasta cierto punto saludable, dado que nos previene de un “movimiento emocional” del que podríamos no estar listos.   Por lo tanto, considero como una de las prioridades terapéuticas y existenciales es, el trabajo con la fuerza interior, como una especie de “banco emocional” que nos permita ir avanzando y solventando las diversas crisis o cambios que suceden  en la vida de todo ser humano que desee evolucionar.

Uno de los mitos contra los que luchas en tu programa es que no existen emociones positivas y negativas. Te refieres al miedo, en primer lugar, como recurso humano. Esto ya ofrece una visión positiva de entrada. ¿Son las etiquetas uno de los mayores frenos que nos acechan?

– Si. Las etiquetas que en el peor de los casos, son la máscara de los juicios con los que hemos sido educados: la sociedad, la cultura, la escuela, la familia nos ha juzgado constantemente en aras de intentar dominarnos y controlarnos, el juicio interno (inicialmente) y hacia los demás siempre es el peor de los tiranos que nos hace defendernos, atrincherarnos, buscar la soledad obligada, porque sentirnos inapropiados y devaluados por los juicios de los demás, pero sobre todo por los propios es la crueldad en si misma.

La lealtad familiar es ese tope que crea un vínculo permanente, atemporal que permanece en nuestra mente por siempre. La lealtad que crea un niño con alguno de los progenitores (el que más sufre) por ejemplo, es un freno que le coarta a la hora de desarrollar plenamente sus habilidades y capacidades. ¿Son los lazos familiares el vínculo más fuerte que existe?

La “lealtad familiar” es ese vínculo atemporal que el niño crea desde su infancia.

– El amor es el vinculo mas fuerte que existe, y por supuesto, ahí esta incluida la familia. Por ser este el vinculo inicial es por lo tanto el mas profundo, el amor” sella” las promesas, secretos, y semejanzas que nos hacen creer que si cumplimos todas estas circunstancias como se dispuso en nuestra infancia, es entonces cuando cumplimos nuestra necesidad básica de pertenencia por un lado y sobre todo cumplimos en el niño interior el amor perpétuo que nunca los dejará solos a nuestros padres, de ahí que hay adultos que siempre están cuidando las promesas a los padres, los secretos familiares, pero muy importante, las semejanzas a ellos para poder sentirse que son “buenos” y serán aceptados.  Falso concepto infantil de niño herido.

Podríamos seguir y seguir porque existen tantas dificultades como personas y no todos estamos dispuestos a cambiar. “La comodidad es la madre de todos los vicios”. ¿El cambio tiene más de miedo que de comodidad?

– La flojera es la máscara del miedo finalmente, y reducir nuestro mundo y acciones a solo lo conocido, a la famosísima llamada área de confort, nos  confina a un lugar limitado y triste de nuestra existencia, la evolución natural y el crecimiento al que tenemos derecho y todos podriamos disfrutar, lo pervertimos al impedirlo, por lo tanto nadie que se quede en su zona de comodidad logrará la felicidad por mucho tiempo.

No es lo mismo sanar bien que sanar mal. ¿Es la voluntad de cada cuál quien determina la forma en que uno sana?

– ”Sanar mal” es una contradicción en si misma, tal vez cicatrizar seria la palabra correcta, cicatrizar mal, que es el cierre patológico por las creencias que se introyectaron de forma dolorosa e incorrecta.

La forma de sanar o hacer una mala cicatriz depende de nuestros recursos y herramientas aprendidas a través de las diversas experiencias vividas, es ese filtro que tenemos cada quien de la visión y percepción de todo lo que nos sucede, el mismo evento puede ser experimentado como catastrófico, mientras que para alguien más es aprendizaje y evolución.

La aceptación de la responsabilidad es, en muchas ocasiones, la clave que permite avanzar hacia la vida desterrando distorsiones congnitivas y adquiriendo conciencia plena de lo que está ocurriendo. ¿Es la negación el mayor enemigo de la responsabilidad?

– No, no toda negación tiene que ver con la responsabilidad, ni toda irresponsabilidad tiene que ver con los  estados involucionados de oralidad no resuelta, es decir, la discapacidad para “ver”, no se puede responder a lo que no se ve, la mayoría de las personas no se percatan de qué es lo que les compete responder, ni dimensiona hasta dónde es necesario su actuar o no actuar referente  algo que tiene que ver con ellos mismos, no es una negación, es una falta de visión y es diferente porque en la negación se puede ver y luego se rechaza ya sea consciente o inconscientemente, pero en la oralidad o infantilismo, verdaderamente no existe esa consciencia.

La clave para avanzar no existe como tal, el desarrollo personal es una serie de pasos y procesos más o menos paralelos entre si y que permiten un crecimiento psicológico y emocional, así como un ser crece procesalmente, así sucede con este tipo de crecimiento que es el más importante, quien resuelve su evolución personal entendiéndolo como una linea no continua, ni siempre ascendente, si no como una serie de hechos concomitados y es entonces que una persona puede “liberarse”.

“No todo el mundo nace para volar pero quien quiere hacerlo merece hacerlo”. Sandra Velarde despierta el alma dormida, sólo de aquellos que quieren despertar. “En confianza” sigue traspasando fronteras. Un proyecto por el que merece la pena luchar; un proyecto que, como pocos, te acompaña siempre desde el respeto hasta donde tú quieras llegar.

 – Algo he hecho bien para merecer tu atención y cariño. Sandra Velarde.