¿Por qué son tan codiciados? Los guantes de un golero en el fútbol equivalen a la camiseta 10, en términos sentimentales. Y tener uno de esos accesorios para un hincha o un aficionado al deporte rey, es como oro en polvo. Los miles de modelos que existen en las tiendas lo hacen una prenda codiciada y, también, imprescindible.
Los codiciados guantes de Iker Casillas, portero español.
Ser golero en el fútbol es difícil pero también consagratorio. De la misma forma, su indumentaria a pasado a convertirse en una moda. Los recientes partidos entre selecciones en Europa y Sudamérica han puesto en la cancha modelos impecables y para todos los gustos, tanto en forma y colores.
Desde los primeros guantes de cuero, han pasado, ahora, a modelos dinámicos, sensibles, prácticos para asegurar el balón y proteger al portero, muy propios del Siglo XXI. Como dicen los propios guardametas, llevar guantes “es un placer” por la comodidad y garantía en contener remates de todo lugar de los delanteros contrarios.
En Europa, incluso, en las temporadas de frío, los guantes producen el calor necesario al guardameta y mantenerlo en buen estado para recibir los remates rivales. Además, es, sin duda, un regalo ideal para esta Navidad que se avecina.
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Sofisticados y seguros
Las fábricas deportivas se preocupan bastante en la elaboración de los guantes de los arqueros. Es clásico y esencial el uso de espuma de látex, por ejemplo, porque proporcionan comodidad y respaldo en las palmas de las manos. Además, la fabricación incluye soportes en los dedos pues es común que los porteros sufran lesiones debido a los remates fuertes.
Los guardametas lo que buscan es contar con guantes que le provoquen libertad. “Una segunda piel”, nos dice un conocido arquero del fútbol peruano. Por eso buscan materiales ligeros pero fuertes como el látex, la espuma, goma y otros materiales que incluyen en su fabricación.
El cuero, incluso la tela y hasta el felpa que se usaban a mediados del siglo pasado, han sido dejados de lado por las fabricaciones sintéticas. Para evitar que quemen o hagan sudar las manos, justamente se usa la espuma. Para el dorso se emplea mucho el neopreno.
Un poco de historia de los guantes
Claudio Bravo también impone la moda.
La historia revela que en 1885 el empresario inglés William Sykes, dedicado a la industria del cuero, fabricó el primer par de guantes con recubrimiento de caucho para uso exclusivo del arquero de fútbol pero su venta no fue exitosa , ya que el deporte rey no solo estaba en pañales sino que el portero “no era bien visto” en esos tiempos remotos.
En los años treinta el guardameta italiano Carlo Cesoroli ya usaba esos accesorios en partidos de la Liga de su país.
En Sudamérica, antes de que llegue la moda de los guantes, los goleros recubrían sus dedos con cinta adhesiva para evitar los esguinces y fue el argentino Amadeo Carrizo quien impulsó la moda, bajo los postes de River Plate, aunque los usaba de lana.
A comienzos de los sesenta, en Perú, estando en plena boga el uso de estos accesorios en Europa, algunos optaron por usar guantes de motociclista. Ya en el Mundial de 1958, el ruso Lev Yashin tapaba con guantes
Fue en los setenta que los fabricantes se animaron, decididamente a la fabricación de guantes para los guardametas, iniciándose un boom de ventas y pedidos. Marcas como Adidas, Nike, Reush, como se dice popularmente, tiraron la casa por la ventana.
Para todos los gustos
Hoy encontramos diversidad de modelos, formas, materiales y colores sumamente atractivos. El portero colombiano David Ospina les gusta mucho los luminosos, sobre todo en los partidos nocturnos y es célebre el alemán Sepp Maier que en los mundiales 1974 y 1978 empleaba accesorios que eran mucho más grandes que sus manos. Esa moda fue seguida posteriormente por los goleros que heredaron la portería germana. Mucho más antes, el uruguayo Ladislao Mazurkiewicz los prefería enteramente de cuero y años después, llegaron los que incluían poros para evitar que el balón resbale.
Con los tiempos de los sponsors, las marcas deportivas se encargan de entregar a clubes y selecciones indumentarias completas que incluyen las de porteros, para evitar que la competencia les arrebate accesorio tan elemental e “imán” de miradas en una cancha de fútbol.
Seguramente los fabricantes continuarán evolucionando en su fabricación. Y mientras tanto aficionados de todo el mundo seguirán apreciando a los Iker Casillas, Claudio Bravo, Keylor Navas y compañía luciendo más y mejores guantes, para deleite de los que amamos el fútbol.
