El jueves empiezan en Sudamérica las eliminatorias al Mundial de Rusia 2018 y como nunca, Brasil llega a la cita tambaleante, sin su cartel de súper favorito y por el contrario, con miedo a quedar, por primera vez en la historia, fuera de la importante cita ecuménica del fútbol.
La “torcida” está temerosa. Brasil inicia su camino al Mundial de Rusia 2018 con más miedo que convencimiento y su debut en Santiago de Chile, el jueves, emerge sobre el Scratch, el espectro de una derrota, algo que nunca había ocurrido en todas las participaciones clasificatorias de los paisanos del rey Pelé.
Dunga, el estratega de Brasil, no convence, el equipo no camina y la ausencia de la estrella Neymar (Barcelona español), suspendido tras ser expulsado en la Copa América de Chile, provoca aún más miedo y temor en los seguidores de la verdeamarilla.
El DT brasileño convocó a última hora al centrocampista Kaká con la esperanza que encarrile el funcionamiento de su equipo. Reemplazará al lesionado Phillipe Coutinho, centrocampista del Liverpool inglés que resultó lesionado en un encuentro ante el Everton por la Liga Premier.
Chile es un rival que está el alza
Brasil ya se encuentra en Santiago para el duelo del jueves. Dunga y sus jugadores saben que el rival enfrente, Chile, está en alza, viene de ganar la Copa América, cuenta con un buen plantel, tendrá el aliento de su hinchada y está con la moral al tope, todo lo contrario a los brasileños, naufragando en la incertidumbre.
Otras bajas que presenta el equipo de Dunga son el delantero Roberto Firmino, también del Liverpool, por molestias físicas, así como los defensores Rafinha (Bayern Munich) y Danilo (Real Madrid).
El Scratch debe ganar a los chilenos o conseguir, al menos un empate, para luego sumar de a tres contra Venezuela, en Fortaleza, el 13 de octubre. Es la única fórmula de recuperar la fe de una nación cien por ciento futbolera y que asume los partidos de su selección como de “cuestión nacional”.
Dunga, incluso reconoció al arriba a Santiago que su elenco está mal en su ánimo. “El gran favorito para este partido es Chile, porque juega en su casa”, dijo a la prensa mapochina.
Aceptó que Neymar “es un jugador importante, como todos, y cuenta mucho para los partidos”, en clara alusión que su ausencia se sentirá en el armado de su escuadra.
Brasil ya no es el poderoso de otros tiempos
La afición chilena, como es obvio, está triunfalista, no teme a Brasil y coinciden, en forma eufórica, que el Scratch ya es el equipo poderoso de otros tiempos.
Las esperanzas visitantes están cifradas en nomnes Hulk, Willian, Luiz Gustavo, Fernandinho, Miranda, Daniel Alves y Óscar, además de Kaká, Douglas Costa, Marquinhos, Lucas y David Luiz, nombres que, sin embargo, como sentenció un aficionado chileno, “no asustan”.
Lo cierto es que Chile y Brasil juegan el jueves en Santiago, iniciando las clasificatorias al Mundial ruso y como nunca, el Scratch ya no es favorito y por el contrario surgen los fantasmas de una eliminación impensada por todo aquel que ama el fútbol.